La institucionalidad hondureña está fortalecida, pero en torno a JOH

Radio Progreso

Contrario a lo que otros señalan que, el gobierno de Juan Orlando está debilitado, el ex Fiscal General de la República, Edmundo Orellana, manifiesta que no está debilitado. Sostiene que Juan Orlando Hernández ha construido una institucionalidad que está a su servicio incondicional.

“Creó el Consejo Nacional de Defensa y Seguridad en donde está el Presidente del Congreso Nacional, el Presidente de la Corte, está el Fiscal General, el Ministro de Defensa y el Jefe del Estado Mayor. Todos ellos responden a los mandatos del gobernante. Tiene unas Fuerzas Armadas incondicionales, una Policía Militar incondicional. La institucionalidad está fuerte, pero en torno al gobernante”, dijo Orellana.

Radio Progreso (RP) dialogó con el abogado Edmundo Orellana (EO) sobre la institucionalidad hondureña frente a la operación de la criminalidad organizada.

RP. ¿Cómo valora usted lo que está viviendo el país?

EO. No me extraña, porque lo que ocurre hoy en Honduras ha ocurrido siempre, pero ahora lo que pasa es que ha quedado al desnudo la gran red de corrupción que gobierna al país, las élites corruptas que son su brazo ejecutor en política. Ahora ya no tienen escrúpulos, ya no se esconden, se enfrentan al pueblo, lo instrumentalizan, hacen cuantas cosas quieren, violan la ley, emiten leyes para protegerse, celebran elecciones sin ley que modernice el proceso electoral, debilitan las instituciones.

RP. ¿Y va camino a empeorarse?

EO. Creo que sí porque las elecciones generales van a ser una repetición de las primarias si no se ponen las medidas correctivas a tiempo. Ya sabemos en dónde está el “talón de Aquiles” del proceso electoral, sabemos de dónde cojea el sistema político electoral, lo único que tenemos que hacer es tratar de eliminar el problema sustituyéndolo con medidas que efectivicen el voto, que se respete el voto y que los resultados sean creíbles y confiables. Es fácil hacerlo, el problema es que los políticos no quieren hacerlo.

RP. ¿Qué lecciones nos dejan los juicios de Nueva York?

EO. La falencia gigantesca del sistema de justicia hondureño porque de todos los que se están juzgando en Estados Unidos, muy pocos fueron capturados en Honduras y casi ninguno tenía juicio pendiente en el país al momento de su entrega, eso indica que el sistema hondureño no funciona. Tenemos que reconocer ante el mundo que es otro país que está aplicando la justicia y no nosotros. También la vergüenza de que se desnuda la sociedad hondureña mostrando toda la pudrición de sus entrañas porque estos caballeros que se están juzgando en Nueva York eran los hombres que gobernaban a este país.

RP. ¿En qué momento se perdió el Ministerio Público?

EO. Fue cuando quisieron imponerles a los fiscales directrices políticos-partidarios. Se produce la primera huelga de fiscales justamente porque en ese momento, el Ministerio Público estaba tratando de lavar la imagen a una gran cantidad de corruptos pidiendo sobreseimientos. En ese momento, los fiscales que habían sido reclutados desde mi tiempo, la mayoría, se fueron a la huelga, paralizaron la institución. Es la primera vez en la historia de Honduras un grupo de trabajadores del pueblo paralizan una institución, se van a la huelga no para exigir condiciones laborales ni mejorías en su trabajo, sino para que la institución se apegara al Estado de derecho en Honduras.

RP. ¿Hay posibilidades de recuperar el Ministerio Público?

EO. Si las hay porque hay mucho personal todavía de aquella época que fue reclutado en forma objetiva, imparcial y atendiendo nada más su capacidad. Las instituciones son recuperables, lo único que se necesita es que la cabeza de la institución le insufle un nuevo paradigma para que se sometan a él los fiscales atendiendo únicamente el interés de la patria, y el interés de la patria en el caso del Ministerio Público es defender y proteger a la sociedad.

RP. ¿Qué va a pasar con JOH?

EO. No dudo que el gobernante, una vez que deje el cargo, va ser procesado en Estados Unidos y que seguramente va a ser extraditado.

RP. ¿Él lo entiende de esa manera?

EO. Yo creo que sí. Es abogado y sabe que es inevitable eso. Ya no se trata de caprichos de analistas o abogados pueblerinos como nosotros sino que son opiniones de juristas gringos y de periódicos como el Washington Post por ejemplo, que ya dio la voz de alarma en la que creen que incluso antes de que termine el gobierno estará procesado.

RP. ¿Por qué un gobierno que se dice está debilitado, sigue firme en el poder?

EO. El gobierno no está debilitado. Juan Orlando Hernández ha construido una institucionalidad que está a su servicio incondicional. Creó el Consejo de Defensa y Seguridad en donde está el Presidente del Congreso Nacional, el Presidente de la Corte, está el fiscal general, el Ministro de Defensa y el Jefe del Estado Mayor. Todos ellos responden a los mandatos del gobernante. Tiene unas Fuerzas Armadas incondicionales, una Policía Militar incondicional. La institucionalidad está fuerte, pero en torno al gobernante.

RP. ¿Ve posibilidades de una Alianza Política Opositora?

EO. Todo depende de la inteligencia con que se manejen las aproximaciones que se están haciendo. Ese llamado que hizo la candidata (Xiomara Castro) del Partido Libre (Libertad y Refundación) a todos para que puedan reunirse y comenzar a identificar los puntos comunes con el propósito de establecer una alianza con la finalidad de que salga el partido gobernante, puede dar frutos, pero todo depende de qué es lo que van a tratar allí.

RP. ¿Cuál es su duda?

EO. El problema que enfrenta Libre es que, al hacer una alianza con el Partido Liberal, por ejemplo, se encontraría que algunos de los que van allí, como candidatos a cargos de elección popular, fueron aquellos cuyas ejecutorias dieron lugar al Partido Libre. Recuerde que Libre nace como consecuencia del golpe de Estado, y muchos que van de candidatos allí, impulsaron y perpetraron el golpe de Estado. Si Libre nace de ese momento violento, acumuló alguna cantidad de odio en su origen, ese odio está latente contra esos señores.

RP. ¿Es Nasry Asfura la carta de JOH, o tendrá un haz bajo la manga?

EO. El gobernante es alguien es imprevisible: él dice que no quiere ser candidato, pero a última hora puede ser candidato, él dice que no quiere continuar, pero a última hora puede continuar. Recuerde que él se está jugando su vida, si deja el gobierno va a pasar toda su vida en una cárcel de Estados Unidos en las que seguramente las condenas que le esperan son de cadenas perpetuas, él sabe eso, y la única manera de evitarlo es mantenerse en el poder porque ya lo dijo Estados Unidos: mientras sea electo por el pueblo, nosotros nos vamos a ir a abrazar con él, es nuestro socio, nuestro amigo. Allí lo vamos a tener si él se decide porque de hacerlo tiene el dinero, tiene los mecanismos para hacer efectivo que el voto se traduzca a su favor y tiene la fuerza bruta porque tiene las armas a su favor.

RP. ¿Qué está en disputa: el control del Congreso o el control del Ejecutivo?

EO. No hay duda de que la oposición pretende llegar a la Presidencia de la República, pero si descuidan el Poder Legislativo lo que van a tener es una presidencia más débil todavía. Imagínese un escenario de estos: el Presidente de la Oposición y el Presidente del Congreso del Partido Nacional, qué sucedería, sería terrible, pero eso puede suceder.

RP. ¿Y dónde queda la recuperación de la institucionalidad?

EO. Eso es más difícil. La recuperación de la institucionalidad sólo es posible si usted tiene en el Congreso Nacional a gente que entiendan a lo que van, y de los que se están postulando muy pocos saben a lo que van, muy pocos saben cuáles son los problemas de la institucionalidad hondureña. Que los hay, los hay, pero son muy pocos.

RP. ¿Quién es el candidato de la Embajada?

EO. La Embajada tiene un problema. Ya lo dijo Adán Restrepo (estratega Demócrata y ex asesor presidencial de Obama): ninguno de los candidatos es aceptable. También dijo que si él fuera asesor de Biden no aceptaría que ninguno de ellos llegara a la Sala Oval (oficina oficial del Presidente de los Estados Unidos), eso significa que hay problemas con estos candidatos, pero a Estados Unidos lo único que le interesa es que el que llegue se someta y que haga un gobierno apegado a sus intereses.