jueves, 14 de septiembre de 2017

Entre la violencia y el abandono, niñez hondureña conmeroró su día



El 10 de septiembre en Honduras se celebró el Día del Niño y la Niña, esto para conmemorar los derechos universales de la niñez y adolescencia. Sin embargo, esa niñez no tendrá nada que celebrar frente a una realidad social que lo único que les ofrece es violencia, esto producto de las políticas de desigualdad impulsadas por los gobernantes.

Solo en el mes de julio, el Observatorio de Derechos Humanos de los Niños, Niñas y Jóvenes de Casa Alianza reportó la muerte en forma violenta de 146 personas, es decir cinco muertes violentas por día.

De ese total de muertes violentas registradas por Casa Alianza Honduras, 74 casos corresponden a niños, niñas y jóvenes menores de 30 años, representando el 50.6 por ciento de las víctimas.

En el transcurso de los 42 meses de gobierno de Juan Orlando Hernández, se han registrado 2,978 muertes violentas y/o ejecuciones arbitrarias de niñas, niños y jóvenes menores de 23 años en el país, según los informes de Casa Alianza Honduras.

José Guadalupe Ruelas, director de Casa Alianza, comenta que la niñez hondureña está sobreexpuesta en una cultura de violencia debido a la ausencia de políticas sociales adecuadas.

“Generalmente se le echa la culpa a los padres y a las madres de los problemas de los niños, siempre y cuando sean pobres, pero en realidad no es un tema doméstico es la ausencia de políticas estatales, de educación, de protección y de salud”, detalla Ruelas.

Educación y salud en el abandono

En la actualidad, un millón 300 mil niños y niñas, entre los 6 y 17 años, se encuentran fuera del sistema educativo. De acuerdo a Casa Alianza, el nombramiento de la nueva Secretaria de Educación, Rutilia Calderón, no se ha visto reflejado en la infraestructura de los centros educativos públicos del país, ya que ésta se encuentra en total abandono y no hay indicios de una mejoría, ni a corto ni a mediano plazo.

“El abandono en que se encuentra la infraestructura del país se ve reflejado en el Centro de Educación Básica José Cecilio del Valle, ubicado en la aldea La Cuesta en San Lorenzo, Valle, el techo del edificio amenaza con derrumbarse en cualquier momento debido al mal estado en que se encuentra, ya que desde hace varios años no ha tenido mantenimiento”, denuncia, en su último informe, el Observatorio de Derechos Humanos de Casa Alianza.

Jaime Flores, miembro de Casa Alianza, señala que uno de los “grandes problemas” que enfrenta el Ministerio de Educación es la reducción del presupuesto: “para qué se lo recorta, para aumentarle al sector seguridad y defensa; recientemente el presidente inauguró dos batallones de la Policía Militar, estamos caminando por la ruta contraria”.

El Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) sigue en agonía producto del saqueo millonario en la administración del presidente Porfirio Lobo. Esa crisis impacta directamente en la vida de la niñez, ante la falta de medicamentos y atenciones médicas de especialidad.

“Actualmente las madres se quejan porque los niños tienen que hacer largas filas no hay especialistas, no hay pediatras. Por otro lado, las madres tienen que recurrir a comprar las medicinas porque no hay”, dice Flores.

La realidad de los niños y niñas en Honduras se ve reflejada en la migración. El Observatorio Consular y Migratorio de Honduras (CONMIGHO) indica que durante el presente año han sido retornados 27 mil 359 hondureños y hondureñas al país, principalmente de Estados Unidos y México. De ese total dos mil 572 son niños, niñas y adolescentes.

“Las niñas y niños se van porque no soportan la realidad de violencia, y no solo miremos la violencia del crimen organizado, sino que la violencia que se da en las familias producto de los entornos y la falta de alimentación y recursos, apunta Flores.

Por su parte, José Guadalupe Ruelas comenta que la niñez hondureña está siendo formada “con autoestima muy baja, con mucho temor al contacto social, temerosa”, por tanto, su vida es un drama constante. Sin embargo, Ruelas comenta que “tener niños y niñas en Honduras es un motivo de alegría y de esperanza para el país”.

No hay comentarios: