viernes, 16 de junio de 2017

Educación aplazada con base de datos sobre bullying



Por Alex Flores

Educación tampoco ha elaborado el Reglamento de la Ley contra el Acoso Escolar ni el Plan de Prevención y Tratamiento del Acoso Escolar.

Autoridades de esa secretaría aseguran que los incumplimientos se deben a que han estado ocupados en otras funciones.

Educación dice que solo tiene recuento de 19 denuncias de bullying en Francisco Morazán y que otras son registradas en las distritales de cada departamento.

En escuelas tampoco se llevan registros de bullying, pese a que hay denuncias de agresiones con objetos cortopunzantes entre alumnos.

La Secretaría de Educación aun no entrega una tarea importante: más de dos años después de aprobar la Ley contra el Acoso Escolar, esta secretaría no ha creado la base de datos para registrar denuncias de “bullying” que le ordena esta ley como medida para prevenir violencia entre alumnos en los centros educativos.
La viceministra de Asuntos Pedagógicos de la Secretaría de Educación, Elia del Cid, confirmó a Revistazo que no se ha elaborado la base de datos porque la dependencia a su cargo ha estado ocupada en estructurar algunos sistemas de atención a alumnos discapacitados o indígenas.
La funcionaria no ahondó en los motivos de este incumplimiento porque interrumpió la entrevista con este medio para atender una reunión con la Ministra de Educación, Rutilia Calderón.
A criterio del diputado del Partido Anticorrupción, Aníbal Cálix, quien presentó el proyecto de ley de esa normativa, la creación de una base de datos es necesaria porque servirá para medir la incidencia real del bullying en centros educativos y para que las autoridades apliquen políticas preventivas ajustadas a la realidad.


El artículo 10 de la Ley contra el Acoso Escolar ordena que la Secretaría de Educación, en coordinación con la Secretaría de Salud, los Consejo Municipales de Desarrollo Educativo (COMDE) y otras entidades que velen por la protección de la niñez, deben crear una base de datos de todas las quejas sobre acoso escolar.
La información anterior debe contener el detalle de casos denunciados de “bullying” por cada centro educativo de los 18 departamentos con el fin de hacer análisis y campañas de prevención a este fenómeno. La Secretaría de Educación también está obligada a divulgar el contenido de la base de datos en el Portal de Transparencia de su página web.
El COMDE tiene entre sus funciones ejecutar, cumplir y verificar la adopción del Plan de Prevención y Tratamiento del Acoso Escolar, el que debe ser definido por la Secretaría de Educación.
La “Ley Anti-Bullying”
La “Ley Anti-Bullying” fue aprobada el 22 de octubre de 2014, es decir que las autoridades educativas han tenido dos años y medio para conformar la base de datos.
El acoso escolar o “bullying” es cualquier forma de maltrato, intimidación, menosprecio o exclusión por medio de una agresión física o psicológica que cause daño entre escolares dentro o fuera del centro educativo, de acuerdo a la definición que hace la ley de esa conducta.

La ley define cuatro tipos de acoso escolar:
Psicológico: Cuando la conducta se manifiesta mediante gritos, insultos, amenazas, prohibiciones, intimidación, indiferencia, ignorancia o todo tipo de marginación, humillaciones, descalificaciones, chantajes, manipulación, coacción y produce un daño o perjuicio en el bienestar psicológico y emocional de otra persona. 
Físico: Mediante el uso de la fuerza o violencia reiterativa de menores hacia otro u otros, que produce un daño y se manifiesta con golpes, empujones, amenazas o, esconder, robar, romper objetos ajenos sin que el agresor se manifieste.
Verbal: Cuando hay un daño emocional a un estudiante mediante insultos, acciones de menosprecio, burlas, uso de vocabulario soez, en público o privadamente.
Cibernético: Cuando la conducta sea manifestada a través de los medios de las tecnologías de la información, tales como: celulares, internet, redes sociales, fotografías y vídeos.

INFOGRAFIA: Tipos de acoso escolar 

Por instrucciones del presidente Juan Orlando Hernández, se habilitaron las líneas 104, de Casa de Gobierno, y la 113, de Educación para recibir denuncias de bullying y resolverlas.
Las quejas canalizadas por estas líneas son enviadas a la Unidad de Denuncias de la Secretaría de Educación, pero nada más las correspondientes a las direcciones distritales de Francisco Morazán.
Estudiantes han denunciado agresiones físicas y psicológicas
Revistazo solicitó a la Unidad de Denuncias de la Secretaría copia de la base de datos de denuncias de bullying a nivel nacional, y la jefa de esa dependencia, María Cruz, respondió que no se ha elaborado esa base y que en Francisco Morazán solo tiene reporte de 19 denuncias de acoso.
“Pero hay muchas denuncias presentadas directamente en las direcciones distritales que por el orden jerárquico les corresponde a ellos resolver en una forma más expedita, y esas denuncias se resuelven de oficio, para proteger garantizar la seguridad de nuestros niños y jóvenes”, dijo Cruz.


Entre las 19 denuncias se encuentran casos por agresiones físicas y psicológicas entre alumnos, malos tratos maestros hacia alumnos y recopilación de denuncias en redes sociales de supuestos hechos constitutivos de bullying. 
Una de las denuncias, registrada en agosto de 2015, indica que un alumno de la escuela Froylan Turcios, de la colonia Brisas del Norte, en Comayagüela, sufre “maltrato por un compañero de clases […] que maltrata a sus compañeros con patadas, escupidas y golpes con instrumentos. El niño [denunciado] recibe castigo, pero luego toma represalias con ellos [los agredidos]. El niño [ofendido] dice recibir hasta amenazas de muerte por parte de este compañero”.
A criterio del diputado Cálix, la falta creación de la base de datos de denuncias de bullying pone en evidencia la falta de interés de las autoridades.
Muerte por supuesto bullying
El parlamentario Aníbal Cálix explicó que la Secretaría de Educación ha hecho análisis de dos borradores del reglamento de esa legislación, pero desconoce por qué no se ha aprobado la reglamentación.
Cálix recordó que él presentó la iniciativa de ley de la Ley contra el Acoso Escolar tras conocer un caso exitoso de prevención de bullying en la escuela donde estudian sus hijos en San Pedro Sula y luego de una serie de denuncias en medios de comunicación de graves agresiones físicas entre estudiantes.
Uno de los casos más dramáticos de supuesto bullying se presentó con la muerte de Carlos Gerardo López, un menor de 11 años, que estudiaba en la escuela Leoenidas Rivera, a manos de varios adolescentes en Ilama, Santa Bárbara, en 2014.
De acuerdo al testimonio de la madre del malogrado infante, Yamileth Cardona, los victimarios le pedían a su hijo 500 lempiras cada cierto periodo para evitar que lo golpearan.
La tragedia llegó el 1 de junio de 2014 cuando Carlos Gerardo López llegó a su casa al medio día después de asistir a clases y luego salió a un taller de ebanistería para que hicieran un trabajo manual, pero el infante nunca regresó.
El cuerpo del niño fue encontrado, al día siguiente, enterrado junto a un árbol en el sector de Lanceltilla, cerca de Ilama, y presentaba heridas de arma blanca en la garganta y las rodillas flexionadas y golpes en el rostro.
Como sospechosos fueron detenidos dos adolescentes y otro identificado como Arafath Martínez Caballero (18).
Los sospechosos, según el relato de vecinos, se dedicaban a cobrar dinero a estudiantes como una especie de extorsión para no lesionarlos.
Ni en escuelas llevan recuentos
Para 2017, la Secretaría de Educación reporta una matrícula de 2.2 millones de alumnos de Prescolar, Primaria y Secundaria en los 22 mil centros de enseñanza. Sin la base de datos ordenada por la Ley, es imposible cuantificar con precisión cuántos de estos niñas, niños, y jóvenes son víctimas del bullying; sin embargo, muchos padres, estudiantes, y organismos de defensa de la niñez aseguran que es un problema serio.
Los Consejos Escolares de Desarrollo en el Centro Educativo tiene la obligación de reportar al COMDE las denuncias de abusos entre escolares y aplicar el Plan de Prevención y Tratamiento del Acoso Escolar. Sin embargo, en la práctica, las escuelas a nivel local han sido igual de negligentes como las oficinas centrales de Educación.
Revistazo visitó la Escuela de Aplicación República de Paraguay, en la colonia Bella Oriente de Tegucigalpa, para constatar si en ese centro se lleva un recuento de casos de acoso escolar, pero tampoco han efectuado el registro.
La docente de Inglés de ese centro educativo, Karla Patricia Lozano, contó que, en efecto, hay algunos actos de agresión entre los alumnos, pero cuantificarlos sería difícil porque no se realiza una tabulación sistemática.
Al preguntarle si la escuela lleva un registro de bullying, la maestra dijo que “consolidado creo que no, pero sí lo llevan por grado”.
Entre los presuntos hechos de bullying en esa escuela se encuentran “pleitos, se dan riñas y peleas entre los niños, se dan cosas como pequeños robos; esas son las cosas que se dan”, relató Lozano.
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Los alumnos del sexto grado C de la escuela Paraguay recibieron una charla sobre prevención del bullying a inicios de 2017 y, según las autoridades de ese centro, se hacen reforzamientos del tema. // Foto: Alex Flores

Denuncias de uso de armas
Pero existen denuncias de madres que apuntan que algunos alumnos usan armas cortopunzantes para intimidar a compañeros, indicó la profesora.
“Dicen que los amenazan con cuestiones cortopunzantes, verdad, todavía no hemos llegado a verificar si es cierto o es mentira”, expresó.
“Hay que abordar a los niños, de qué grado son, a ver si es cierto o solamente son amenazas de parte de los niños”, dijo Lozano en referencia a las investigaciones que, se supone, harán para confirmar la veracidad de la denuncia.
Cuando existe un caso de acoso o mal comportamiento en esa escuela, las maestras lo reportan a una unidad de disciplina y se llama al padre de familia para que aconseje al alumno a que mejore su conducta.
Pero cuando el caso es de mayor gravedad, se notifica a la Dirección para que se tomen medidas correctivas que puede llegar hasta la expulsión, explicó.
Las acciones disciplinarias que se aplican en la Escuela de Aplicación República del Paraguay son las mismas que desde hace años se han puesto en práctica en escuelas y colegios, es decir no corresponden a las acciones de atención fijadas en la Ley.
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La sana convivencia es uno de los valores que la Ley contra el Acoso Escolar promueve entre los estudiantes de escuelas y colegios. // Foto: Alex Flores

La Ley contra el Acoso Escolar establece que cuando se reporten casos de bullying, se deben de aplicar medidas de prevención e intervención para proteger de forma inmediata la integridad del agredido y algunos correctivos para el denunciado que la Ley no especifica.
También la norma ordena que se tienen que ejecutar medidas disciplinarias proporcionales a la falta, pero no hace ninguna clasificación de los actos con los que se pueda transgredir esa ley.
Por su lado, Glenda Maldonado, directora de la Escuela Lempira de Comayagüela, aseguró a Revistazo que este año no se registran casos de bullying porque se ha puesto en marcha una campaña de prevención.
En 2016 se contaron algunos episodios violentos entre alumnos de la Escuela Lempira, que la directora Maldonado no precisó, pero que, asevera, no se pueden calificar como acoso escolar. 

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