En incertidumbre han quedado al menos 58 mil hondureños y hondureñas beneficiarios del Estatus de Protección Temporal, TPS, en Estados Unidos luego del fracaso de las negociaciones que por al menos 16 meses buscaron un acuerdo con la administración del Presidente Joe Biden.
Son al menos 337 mil los tepesianos provenientes de países como Honduras, Nicaragua, El Salvador y Nepal, que tienen hasta el 31 de diciembre de 2022 para mantener un estatus legal en el país del norte, luego de que, durante la administración de Donald Trump, en el 2018, fuera cancelado.
La negociación entre los beneficiarios del TPS y la Casa Blanca buscaba encontrar una salida a la demanda Ramos Vs Mayorkas; esta demanda se interpuso en una corte federal de California cuando el programa fue cancelado por la administración del expresidente Donald Trump en 2018.
Patricia Montes del Centro Presente, ubicado en Boston, Estados Unidos, dijo en Radio Progreso, que no todo está perdido y esperan que antes del 15 de diciembre se pueda tener respuestas para la población tepesiana.
“No queremos alargar a nuestras comunidades, sabemos que las negociaciones entre los demandantes y la administración Biden han culminado de una manera no satisfactoria, sin embargo, hay otras demandas interpuestas en varias cortes en Estados Unidos que sería una herramienta para apaliar cualquier desenlace negativo”, señaló Montes.
Una comitiva de la Cancillería hondureña se encuentra en Washington en rondas de reuniones en las que el tema migratorio y la situación del TPS ha adquirido importancia, según el vicecanciller Antonio “Tony” García.
Los migrantes esperan que el Gobierno de Honduras pase del discurso a la práctica y que continúen las acciones de cabildeo con el Gobierno de Estados Unidos para que antes del 31 de diciembre puedan contar con una respuesta favorable que les permita abandonar la zozobra en la que se encuentran.
“Sería algo muy lamentable, será un caos, ya la comunidad con TPS está viviendo ya ese caos, es una incertidumbre. Los beneficiarios del TPS ya están sufriendo porque en sus empleos ya les están pidiendo un permiso de trabajo actualizado”, señaló el hondureño Mardoel Hernández de la Alianza Nacional TPS.
Más de un millón de hondureños y hondureñas viven en Estados Unidos, entre residentes legales e indocumentados. Desde hace más de dos décadas se han convertido en parte fundamental de la columna vertebral de la economía de Honduras.
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