lunes, 6 de agosto de 2012

Por represas inminentes, los pobladores de Concepción se acercan al movimiento de resistencia indígena




Por Andrea Lammers

Alrededor de 350 personas se juntaron el día 30 de julio en Concepción, Intibucá, zona fronteriza entre Honduras y El Salvador para expresar su repudio en contra de varios proyectos de represas hidroeléctricas en los ríos Guarajambala, Chinacla, San Juan, Torola, Lempa y Río Negro.

A la movilización llegaron delegaciones del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) a pie y en buses desde diferentes municipios cercanos y lejanos para apoyar a las demandas de la población de Concepción en contra de aquellos megaproyectos que podrían llevar al desalojo de cientos de familias de campesinos lencas y que traerán consigo, serías consecuencias ecológicas.

“Para nosotros fue una experiencia novedosa tener una asamblea tan grande en Concepción”, comenta Tomás Gómez Membreño, miembro del COPINH e interlocutor de la radio comunitaria La Voz Lenca en La Esperanza, Intibucá: “Hasta ahora no ha habido mucha organización en aquel municipio históricamente muy conservador y no nos gusta imponer nuestros planteamientos a nadie. Sin embargo ahorita nos llamaron y estamos muy dispuestos a apoyarles en su lucha contra las represas hidroeléctricas y proyectos mineros”.

El Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) también denunció que recientemente se han desplazado a esta misma región ex oficiales de las Fuerzas Armadas para reclutar jóvenes lencas para las tropas llamadas “Tigres”. En Concepción antes se funcionó un destacamento militar de las fuerzas armadas hondurenas que según moradores del lugar, también sirvió como base de inteligencia militar estadounidense, en donde se practicaron torturas y asesinatos de numerosas personas.

Después de la asamblea que se llevó a cabo bajo el techo del mercado de Concepción, habitantes de esta comunidad y dirigentes del COPINH se dirigieron a la municipalidad para emprender una plática con las autoridades correspondientes en cuanto a los megaproyectos inminentes y sobre el terreno del ex-destacamento militar.

El alcalde les manifestó no poder hacer nada respecto a las represas planificadas puesto que el poder está centralizado y no tiene competencia para tomar decisiones. En cuanto al terreno anteriormente militar, donde hoy en día habita un grupo de campesinos, destacó estar procesado por apoyar a los denominados invasores.

No hay comentarios: