Por Padre Andrés Tamayo
El sacerdote, Andrés Tamayo, de origen salvadoreño, a quien el régimen de facto de Roberto Micheletti quitó la nacionalidad hondureña, calificó de “invento” la Ley Reguladora de la Inversión Público-Privada, para “convertir en piñata los bienes del estado- pueblo”.
Y, agregó “es solamente para poner a la venta los bienes del Estado, y como no tienen dinero para pagar lo que se robó el gobierno golpista, en confabulación con el actual gobierno”.
Tamayo afirmó en una nota electrónica enviada a la Radio Súper 10, de Olancho, que los continuadores del golpe de Estado “no hayan como sacar el dinero para salir adelante con las deudas que se dejó, en pocas palabras: del mismo cuero del pueblo, quieren sacar las correas”.
Y proclamó que “el día de mañana el actual gobierno se lavará las manos, como antes lo hizo en otros tiempos. Es una forma de empeñar lo que no es de ellos”.
Sería suicidio de los maestros, si no luchan por sus derechos.
“Con dejar a un lado el robo del dinero del Inpremah, está dejando sin vida y préstamos al magisterio. Por lo tanto, si no luchan o reclaman, estaría suicidándose, el magisterio. Deben de ser fieles al respeto de sus derechos”, aconsejó Tamayo a los docentes.
“El magisterio, hoy más que nunca, debe demostrar su capacidad de defensa de lo que le cuesta, y que aprenda a no depositar en el gobierno los frutos de su trabajo”, destaca Tamayo.
El padre Tamayo es un ambientalista defensor del bosque, en especial en la zona de Olancho y organizador de las caminatas por la vida; se opuso al golpe de Estado; y aportó su orientación espiritual al presidente Manuel Zelaya, cerca de cuatro meses, durante permaneció recluido en la embajada de Brasil en Honduras junto a su esposa, Xiomara Castro de Zelaya, y a otras personas.
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